Si pudieras encontrarte
Más allá de tu mirada,
mi alma, en tu alma cautivada,
pretendería abrazarte.
¡Sí amor! quisiera prendarte
Por un instante a mi lado,
y ante ti, maravillado,
como ante un café bien hecho,
con tu esencia honda en el pecho,
sumérgete en tu amor sagrado.