El Mejor Café
No es que quiera hacer alarde
pero ya hay arte en mis manos
para conquistar: temprano,
al mediodía o la tarde.
Se enardece hasta el cobarde,
porque en mi café arden bríos.
Yo lo sazono y confío
que no fallará mi cata.
Pues si de esencia se trata,
el mejor café es el mío.